El componente central de un calentador de cuarzo es el tubo de cuarzo, que generalmente se llena con un filamento de tungsteno o gas halógeno. Cuando se energiza, el tubo de cuarzo puede alcanzar su potencia nominal en poco tiempo, típicamente en 1-2 segundos, convirtiendo la energía eléctrica en energía térmica.
Función termostática: el termostato equipado puede ajustar automáticamente la potencia de acuerdo con la temperatura establecida. Por ejemplo, el calentador de espacio de cuarzo radiante de Midea permite un fácil ajuste del termostato a través de la perilla de control superior, estableciendo con precisión la temperatura al nivel deseado. Ofrece tres configuraciones de calor: 500W/1000W/1500W, que satisface las diferentes necesidades de calefacción.
Rendimiento de seguridad: la mayoría de los productos están equipados con múltiples funciones de protección de seguridad. Por ejemplo, el calentador de espacio de cuarzo infrarrojo Lifesmart está provisto de un bloqueo de seguridad infantil, un exterior de toque frío, un interruptor de seguridad sobrecalentado y un interruptor de seguridad de punta. El calentador eléctrico personal compacto de Crane presenta una función de protección contra sobrecalentamiento, que se apaga automáticamente cuando la temperatura es demasiado alta para evitar temperaturas inseguras. Su diseño de carcasa externa fría también ayuda a prevenir los escaldes.